El Ministerio de Salud de Costa Rica dio a conocer que a partir del 9 de septiembre, fecha en que entra en vigencia la fase de reapertura controlada, las personas que circulen en espacios públicos y que ingreses en los establecimientos comerciales a los que se les haya permitido funcionar, deberán portar máscaras de manera obligatoria, como una medida de protección.
Asimismo, incentivaron al uso de protectores faciales como una medida extra de seguridad para los costarricenses, aunque estos protectores, también conocidos como caretas, no son obligatorios.
“La mascarilla es un medio que nos ayuda a ser solidarios, especialmente con los demás. Si todos usamos mascarillas correctamente, se disminuye considerablemente el riesgo de transmisión; pero si alguien falla en utilizarla en un recinto cerrado, está vulnerando ese escudo y la protección de las personas que estén en ese recinto”, dijo Daniel Salas, ministro de Salud en un comunicado.
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